me encanta lo que ha escrito mi amiga mónika, corresponsal de "un sol que en invierno" en bariloche, argentina. aquí sus palabras sobre esa uá.
Cesar, tu libro es como un diario!, pense primero. Despues pense que no, que eran pequeñas historias verdaderas mezcladas con fabulas!, no porque no hayan sucedido sino por como las expones a los ojos nuestros, llenas de pequeños detalles...magicas, pero tambien mundanas. Y entonces me vino a la mente una frase de un amigo, en relacion a la creacion de objetos artisticos: " sacralizar lo cotidiano"...decia él.Y en parte creo que hay algo de eso en tu obra: hay como pequeños rituales narrados: las visitas de los domingos:esas que esperas con tanto placer; la matanza de las moscas de tu madre, la cajita de los recortes de periodicos, la descripcion de alguna mujer, las cronicas de sucesos increibles ( "crease o no" by Bedon, jajajaja) todo sigue como un hilo...invisible de a ratos, unidos por tu lenguaje. Y nos llevan a detener la mirada en cosas cotidianas, en momentos, palabras con las que nos encontramos todos los dias.Y esto de colocar cosas, sentimientos situaciones, palabras, gente en el lugar en que vos los pones es como un homenaje, un aviso: guarda que estan aca, que son parte de nuestros dias.Bueno, eso senti, mas alla de que vivamos en lugares distintos, y que tengamos diferentes maneras de nombrar las cosas el sentido en la mayoria de las veces es el mismo, y es ahi donde uno se siente hablado por otro.Eso es : el milagro de sentirse hablado por Cesar Bedon.te quieroMonika